Considerado uno de los gigantes de las utilidades de compresión gracias a su inmenso abanico de opciones, WinRAR ha lanzado recientemente su quinta versión, tras una fase beta de varios meses.
La novedad más importante es la introducción de RAR5, un nuevo formato que promete una mayor velocidad de compresión y descompresión, así como un algoritmo de cifrado más seguro. Queda por ver si se convertirá o no en el formato preferido de los usuarios.
Por el momento, RAR sigue siendo la configuración predeterminada para las tareas de compresión, ya que WinRAR tiene en cuenta los problemas de compatibilidad que pueden surgir al enviar archivos a otros usuarios (las versiones anteriores de WinRAR no son compatibles con RAR5).
Instalación e interfaz
La primera característica destacable se puede observar en el propio instalador: WinRAR ahora ofrece soporte de extracción para archivos XZ, además de los anteriormente soportados RAR, ZIP, 7-ZIP, ACE, ARJ, BZ2, CAB, GZip, ISO, JAR, LZH, TAR, UUE y Z.
La utilidad puede integrarse en el menú contextual del Explorador y permite a los usuarios personalizar las entradas del menú para comprimir, extraer, probar o reparar archivos rápidamente sin iniciar la interfaz; no se han realizado cambios en este aspecto.
En cuanto a la interfaz, la aplicación se mantiene fiel a la modesta apariencia a la que ya se han aficionado sus usuarios más veteranos. La interfaz gráfica de usuario es lo suficientemente intuitiva como para que los principiantes se familiaricen con ella rápidamente, con opciones de navegación bien organizadas en la barra de menús y en el menú del botón derecho del ratón.
Opciones destacables
Entre las características más importantes de WinRAR podemos mencionar el bloqueo de archivos (no pueden ser modificados por WinRAR), pruebas, reparaciones, comentarios, protección contra daños, protección por contraseña y benchmarking, junto con una función de búsqueda, herramienta de escaneo de virus, opción de autoextracción y asistente para crear, desempaquetar o añadir ficheros a archivos existentes.
La creación de archivos autoextraíbles (SFX) permite a los usuarios extraer archivos y carpetas sin necesidad de utilizar herramientas especializadas, aunque no tengan WinRAR instalado. Puede programar un programa para que se ejecute antes o después de la extracción, especificar los archivos que desea eliminar en la carpeta de destino, así como seleccionar el modo de actualización (extraer y reemplazar, extraer y actualizar, o sólo actualizar los archivos existentes).
La compresión sólida se recomienda cuando se procesa un gran número de archivos pequeños o archivos con el mismo formato, con el fin de lograr una mejor relación de compresión. La protección por contraseña puede ir acompañada de la encriptación del nombre del archivo para maximizar la seguridad, mientras que WinRAR permite organizar una lista de contraseñas de uso frecuente.
Nuevas funciones
El tamaño del diccionario de WinRAR se utiliza para comprimir patrones repetidos en el procesamiento de la información. Cuanto mayor sea, más pequeño será el archivo de salida, pero se alarga la duración de la tarea y se utilizan más recursos del sistema.
El tamaño del diccionario de RAR5 de 64 bits puede aumentarse hasta 1 GB, mientras que 256 MB es el valor máximo para 32 bits. Es más eficaz a la hora de comprimir archivos de gran tamaño, como copias de seguridad del sistema y colecciones de música, películas y fotografías. Sin embargo, tanto la variante de 32 bits como la de 64 bits son capaces de extraer contenido de archivos de cualquier tamaño de diccionario, incluido 1 GB.
Los parámetros especializados de compresión de texto, audio, color verdadero y ejecutables de 64 bits (Itanium) no están disponibles en RAR5, ya que su rendimiento es bajo en comparación con la compresión general. Sin embargo, estas opciones siguen estando disponibles para el RAR clásico.
WinRAR 5.0 introduce la función hash criptográfica de alta seguridad BLAKE2, muy útil para identificar contenidos de archivos duplicados. Es tan rápida como MD5 en plataformas de 64 bits, pero sólo está disponible para RAR5. Si no se utiliza la firma BLAKE2 al comprimir RAR5, se creará en su lugar la suma de comprobación CRC32.
Para acelerar la descompresión de RAR5 se utilizan varios núcleos de CPU. Se recomienda hacerlo cuando se utilizan firmas BLAKE2 o cuando se trata de archivos de gran tamaño. Además, RAR5 admite el algoritmo de cifrado AES-256 y puede guardar enlaces simbólicos y duros NTFS.
Aunque el modo de recuperación para RAR5 iguala al formato anterior en potencia a la hora de reparar daños contiguos, ofrece mejores resultados a la hora de arreglar archivos dañados en múltiples segmentos. Además, permite que el registro de recuperación sea tan grande como el propio archivo comprimido.
Comprimir archivos con volúmenes de recuperación o extraer datos de estos conjuntos es más rápido que en el formato RAR anterior. Los conjuntos de volúmenes de recuperación también almacenan ahora las sumas de comprobación de los archivos RAR protegidos. El comando "Reparar" puede utilizar los datos de un registro de recuperación parcialmente dañado (aunque no haya superado la prueba de validez) para recrear la estructura del archivo y acceder a los ficheros no dañados.
Siguiendo con la lista de novedades, se han eliminado los comentarios de archivo y la verificación de autenticidad tanto en RAR5 como en el RAR clásico (ya que se demostró que no eran fiables), los nombres de archivo y los comentarios de archivo ahora utilizan codificación UTF-8, mientras que la longitud de la ruta de archivo en los archivos RAR y ZIP puede almacenar hasta 2048 caracteres.
Prueba de RAR5 y comparación con el antiguo RAR
Sometimos a compresión una carpeta de 26,3 GB para evaluar las capacidades del nuevo formato. La máquina de pruebas era una CPU Intel Core i5-2400 y 8 GB de RAM con Windows 8 Pro de 64 bits, en un disco duro Seagate Barracuda SATA-III de 500 GB con 16 MB de caché (ST500DM002-1BD142).
Utilizando la configuración por defecto de RAR5 (método de compresión normal, diccionario de 32 MB, multi-threading activado), WinRAR comprimió la carpeta en 46 minutos y 4 segundos, generando un archivo de 19,9 GB. Para obtener los mejores resultados de rendimiento, aplicamos el mejor método de compresión y un diccionario de 1 GB, con multi-threading activado. Aunque WinRAR tardó más tiempo en realizar la tarea (1 hora, 9 minutos y 50 segundos), redujo el tamaño del archivo RAR5 a unos asombrosos 13,8 GB, lo que supone casi el 50% de la carpeta original.
Para la segunda parte de la prueba, queríamos comparar los puntos fuertes y débiles entre RAR5 y su predecesor. Se utilizó la misma carpeta de 26,3 GB en ambos trabajos de compresión, y ajustamos RAR5 a la configuración por defecto de RAR: método de compresión normal, tamaño de diccionario de 4 MB y multi-threading activado. Además, en el viejo RAR se desactivaron los métodos de compresión de texto, audio, color verdadero y ejecutable de 64 bits (Itanium).
En cuanto a los resultados, la operación de RAR5 se realizó en 35 minutos y 14 segundos (produciendo un archivo de 20 GB), mientras que el RAR clásico cruzó la línea de meta en 37 minutos y 26 segundos, creando un archivo de 20,2 GB. Las diferencias entre ambas versiones son apenas perceptibles, por lo que podemos afirmar sin temor a equivocarnos que el nuevo RAR5 debe utilizarse a pleno rendimiento cuando se manejen archivos de gran tamaño para obtener los mejores resultados.
La extracción de todos los archivos y carpetas de un archivo RAR5 de 19,9 GB se realizó en 17 minutos y 46 segundos. Añadir y reemplazar dos ficheros en un archivo de 3,57 GB con el mismo formato le llevó a WinRAR 5 minutos y 38 segundos.
Las pruebas con RAR5 se repitieron en un SSD Kingston HyperX 3K SATA-III de 240GB, aplicando la configuración por defecto utilizada anteriormente en RAR5 sobre la misma carpeta de 26,3GB. La compresión del archivo tardó 37 minutos y 20 segundos (un 19% menos que en el HDD). La extracción de archivos y carpetas se realizó en 4 minutos y 52 segundos (una impresionante reducción del 73%).
Como era de esperar, en todas estas pruebas WinRAR acaparó recursos del sistema y ralentizó considerablemente la capacidad de respuesta del ordenador (especialmente con RAR5 en el mejor modo de compresión).
Lo bueno
Desde nuestro anterior análisis, WinRAR ha puesto sobre la mesa un nuevo formato que ofrece a los usuarios mayores y mejores opciones de compresión y seguridad, al tiempo que elimina o sustituye viejas características (por ejemplo, el estándar de tiempo para los nombres de archivo se modifica de hora local a UTC, facilitando a los usuarios el intercambio de archivos a través de diferentes zonas horarias).
La utilidad de línea de comandos incluye nuevos parámetros y también excluye los antiguos (por ejemplo, la sintaxis del modificador -md admite diccionarios de mayor tamaño, se elimina el comando "cf" para excluir la carpeta base de los nombres).
WinRAR es compatible con arquitecturas de 32 y 64 bits y con los principales sistemas operativos, incluido Windows 8.1 (aunque el desarrollador no lo ha anunciado oficialmente, lo hemos probado y WinRAR se integra sin problemas en el último sistema operativo). La aplicación ofrece soporte multilingüe e incluye documentación de ayuda para usuarios comunes y profesionales.
Lo malo
La interfaz no se ha actualizado en mucho tiempo, y no le vendría mal un lavado de cara.
La Verdad
WinRAR impresiona con su última versión, ya que el nuevo RAR5 demuestra ser un formato de archivo imprescindible en el arsenal de cualquier usuario serio, respaldado por métodos de cifrado de primera calidad. Para evitar problemas de compatibilidad al compartir archivos, puedes seguir utilizando el RAR clásico hasta que su sucesor se distribuya ampliamente, o utilizar en su lugar archivos SFX.
